CETRAA, CONEPA, FACONAUTO y AERVI coindicen en que la escasez de personal y la falta de rentabilidad son los principales problemas del taller de V.I.

Los talleres de reparación de vehículo industrial cierran 2023 con un incremento de la facturación por los servicios que prestan tanto a transportistas autónomos como a flotas. Pero esa mejora de las ventas no va acompañada de un aumento de la rentabilidad. Antes al contrario, las dificultades para captar y retener trabajadores cualificados, así como las inversiones que están realizando para avanzar en la digitalización de sus negocios y en la adquisición de los conocimientos y maquinaria necesarios para realizar el mantenimiento de camiones y autobuses cada vez más electrificados, conectados y automatizados, está erosionando su margen comercial y resultado económico. Es la principal conclusión de la reciente mesa redonda “Realidad y desafíos de la posventa de V.I.” convocada por el Club de la Posventa de V.I. y que contó con la participación de representantes de CETRAA, CONEPA, FACONAUTO y AERVI.

A pesar de las dificultades y las numerosas incertidumbres que representa la evolución del transporte de mercancías y pasajeros hacia una movilidad más sostenible y descarbonizada, la posventa del vehículo industrial goza de una razonable salud. Así se puso de manifiesto en la reciente mesa redonda convocada por el Club de la Posventa del Vehículo Industrial, que integra a más de cuarenta y cinco empresas e instituciones especializadas en el aftermarket del camión y el autobús, con la colaboración de Motortec, el salón de la posventa de automoción promovido por Ifema.

Moderada por Raúl González, consultor de MP3 Automoción, participaron en la misma Antonio Atiénzar, presidente de la Comisión de Vehículo Industrial de la Confederación Española de Talleres (CETRAA), Ána Ávila, directora corporativa de la Federación Española de Empresarios de Talleres de Automoción (CONEPA), Pilar Fernández, presidenta de la División de Vehículo Industrial de la Federación de Asociaciones de Concesionarios de Automoción (FACONAUTO) y Carlos Martín, secretario general de la Asociación Española de la Posventa del Vehículo Industrial (AERVI).
La escasez de personal y la falta de rentabilidad fueron las dos ideas centrales en torno a las que giró un encuentro donde se puso de manifiesto la rivalidad existente entre los servicios oficiales del concesionario y los talleres independientes. Pero, también, su complementariedad por cuanto los talleres independientes son compradores de recambio del constructor a los concesionarios y suelen beneficiarse del importante parque de vehículos flotista que al finalizar la garantía o los contratos de mantenimiento salen de nuevo al mercado como vehículos de ocasión.
 

La visión del taller independiente

Los representantes asociativos del taller independiente insistieron en la necesidad de que la legislación facilite el acceso de los reparadores multimarca a recursos fundamentales para intervenir sobre los vehículos más modernos como el acceso al dato y a la formación e información técnica. Igualmente, pusieron el acento en lo complicado que le está resultando al taller independiente conseguir una rentabilidad adecuada a pesar de mejorar su facturación respecto al año anterior debido a las importantes inversiones que tiene que hacer para avanzar en su transformación digital y adquirir los conocimientos y maquinaria necesarios para trabajar sobre los nuevos vehículos que salen al mercado. En este sentido, se destacó también que la creciente presión normativa sobre los talleres no solo es motivo de preocupación por las dificultades que tienen este tipo de empresas, de tamaño reducido, para alinearse con ellas, sino porque casi siempre constituyen costes añadidos. Por último, tanto Antonio Atiénzar, de CETRAA, como Ána Ávila, de CONEPA, destacaron el espíritu de superación y resiliencia del taller independiente y se mostraron convencidos de que, gracias al mismo y con ayuda de otros actores de la cadena de valor como redes de talleres y distribuidores y fabricantes de recambio, los reparadores multimarca conseguirán adaptarse a los desafíos de la reparación de los vehículos de la nueva movilidad del transporte de mercancías y pasajeros, incluido el reto del auge del cliente flotista frente al transportista autónomo. Y mandaron un último recado a las Administraciones Públicas: que se les tenga más en cuenta en los foros donde se define el futuro y las estrategias de movilidad y descarbonización.
 

La visión del concesionario

Como ya sucediera en las anteriores mesas redondas con las asociaciones más representativas de la posventa del vehículo industrial en nuestro país, Pilar Fernández, de FACONAUTO, destacó las ventajas competitivas de los servicios oficiales del concesionario en razón de su relación directa con los fabricantes de vehículos. Explicó que los concesionarios llevan años invirtiendo en la formación adecuada para poder reparar los nuevos vehículos cada vez más electrificados que llegan al mercado. Y analizó, asimismo, por qué la evolución del mercado del transporte con el auge de las flotas frente a los autónomos mejora el posicionamiento competitivo de los reparadores oficiales. La portavoz de los concesionarios realizó, igualmente, un balance positivo del desempeño de estos durante 2023, tanto en el área de ventas como de posventa, pero alertó de que son muchas las incertidumbres para 2024 y que sus representados tienes que ser más y mejor gestores que nunca, optimizando procesos y estando pendientes de eventuales impagos.
 

La visión del distribuidor de recambios

Carlos Martín, secretario general de AERVI, destacó, por su parte, el estupendo ejercicio 2023 que están teniendo los distribuidores de recambios, matizando que empezó mejor (con crecimientos de la facturación bruta del 14% en el primer tramo del año) y que va a terminar algo más moderado, en torno al 8% anual, por la ralentización del sector del transporte al pasar de los meses y el incremento de sus costes. En cuanto a la competitividad del canal independiente, Martín subrayó que lo que éste necesita es igualdad de condiciones y acceder a los recursos necesarios para poder competir, porque en base a eso, luego estará el distribuidor de recambio o el fabricante para hacer sentir al taller independiente que no está solo. Hablaríamos fundamentalmente de acceso a la formación e información técnica. El resto, lo regulará el mercado. A su juicio, el taller independiente está perfectamente capacitado para adaptarse y competir como ha hecho durante años. En cuanto la distribución de recambios, animó a los empresarios a trabajar en la rentabilidad de sus negocios y en la gestión de procesos, así como a invertir en formación y en tecnología. Invitó al sector a confiar en sus asociaciones y provechar sus servicios y pidió para el año 2024 mayor certidumbre a todos lo niveles: política, económica y empresarial. Sus últimas palabras fueron para las Administraciones Públicas y el legislador, animándoles a regular los mercados pensando en los consumidores y el mantenimiento del tejido empresarial del transporte y de la posventa, con estrategias claras que transmitan certidumbre a medio y largo plazo.